Esta reflexión me lleva a los momentos de mi infancia y mi juventud, cuando el respeto estaba sólidamente instalado en la sociedad. Había un respeto total en la familia, en la escuela, en los lugares de trabajo, etc., Pero en nuestros tiempos no es así, a pesar de que es mucho mas difícil vivir sin respeto. Hemos desmejorado nuestra calidad de vida, a tal punto que vamos por la calle sin mirar a nadie, sin saludar, metidos hacia adentro, rumiando nuestras dificultades, amargados y sin importarnos nuestro prójimo.- Contestamos mal y nos contestan mal.- Detengámonos aquí, propongámonos mañana levantarnos con una sonrisa, miremos a nuestro alrededor y no a nuestro ombligo. Empecemos por saludar a nuestro vecino, al portero de nuestro edificio, a los profesores, clientes etc., en fin empecemos bien el día, que respetando a los demás, nos estamos respetando a nosotros mismos.-Enseñemos a nuestro hijos la importancia que tiene ser respetuosos con sus amigos, con sus maestro, con sus padres, con sus abuelos, etc.
HAGAMOS UN MUNDO MEJOR BASADO EN EL RESPETO A LOS DEMÁS.-
Adelina Riportella
HAGAMOS UN MUNDO MEJOR BASADO EN EL RESPETO A LOS DEMÁS.-
Adelina Riportella
